DOLORES EN LAS ARTICULACIONES DESPUÉS DE LOS TRATAMIENTOS
La importancia de la fascia
Después de haber sobrevivido al cáncer, a la cirugía y luego a la quimioterapia, el próximo desafío es a menudo, lidiar con los efectos secundarios de estos tratamientos. Entre las posibles complicaciones están los dolores articulares y la restricción en su movimiento, especialmente en las áreas más cercanas al núcleo del cáncer. En el caso del cáncer de seno, por ejemplo, el hombro y el brazo pueden sufrir disminución en su movimiento por la tensión de los músculos pectorales traumatizados. Las otras articulaciones del cuerpo también pueden experimentar debilitamiento e intenso dolor. Su tratamiento generalmente puede consistir en analgésicos, esteroides, e incluso antidepresivos los cuales, por supuesto, no se dirigen al origen del dolor, siendo casi siempre inefectivos.
La fascia, que envuelve a las articulaciones y músculos,es un elemento crucial en este escenario y pocas veces es tenido en cuenta. Una fascia saludable es flexible y elástica y funciona como un lubricante entre los músculos. Es un componente estructural importante de las articulaciones,permitiendo su movimiento fluido y libre.
Impacto de la Quimioterapia